El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, ha sentado las bases para posibles recortes en las tasas de interés, aunque se abstuvo de ofrecer detalles precisos sobre cuándo o en qué magnitud se llevarían a cabo. En un discurso importante durante el retiro anual de la Fed en Jackson Hole, Wyoming, Powell enfatizó que la política monetaria está en un punto de ajuste, alineándose con los datos recientes sobre la inflación y el mercado laboral.

El contexto del discurso de Powell

Durante sus declaraciones, Powell mencionó la necesidad de adaptar la política monetaria a las condiciones actuales. Afirmó que "la dirección del viaje es clara", y que el tiempo y el ritmo de los futuros recortes de tasas dependerán de la información económica que se reciba. Esta expectativa surge en un contexto donde los mercados están a la expectativa de cambios en la política monetaria, tras una serie de 13 incrementos en las tasas desde marzo de 2022 hasta julio de 2023.

Avances en inflación y empleo

Powell destacó el progreso en la lucha contra la inflación, que ha disminuido significativamente, permitiendo a la Reserva Federal redirigir su atención hacia la estabilidad del empleo. Comentó que "las limitaciones de la oferta se han normalizado" y que "el equilibrio de los riesgos para nuestros dos mandatos ha cambiado". Esto indica un entorno en el que la Fed puede priorizar la mejora en el mercado laboral mientras se mantiene la inflación bajo control.

• La inflación ha regresado a un nivel del 2.5%, por debajo del 3.2% del año pasado.
• La tasa de desempleo ha ido aumentado paulatinamente hasta situarse en un 4.3%.
• Powell atribuyó este crecimiento en el desempleo a un incremento en la fuerza laboral, más que a despidos masivos.

Expectativas de los mercados

Los inversores anticipan que la Reserva Federal pueda comenzar a realizar recortes en las tasas de interés desde septiembre, aunque Powell no especificó ninguna fecha. Las actas de las reuniones recientes sugieren que la mayoría de los funcionarios de la Fed considera que un recorte en septiembre sería adecuado, siempre que los datos económicos no presenten sorpresas negativas.

En su evaluación, Powell también dedicó tiempo a analizar los factores que llevaron al aumento de la inflación, que alcanzó niveles no vistos en más de 40 años. Reconoció que en un principio la Fed consideró la inflación como "transitoria", atribuible a circunstancias temporales relacionadas con la pandemia. Sin embargo, al darse cuenta de su persistencia, la Fed cambió su enfoque hacia la política monetaria, incrementando significativamente las tasas de interés.

Lecciones y reflexiones

Powell reflexionó sobre las lecciones aprendidas durante este período, señalando que “las expectativas de inflación bien ancladas, reforzadas por la acción decidida del banco central, pueden facilitar la desinflación sin necesidad de producir una desaceleración extrema en la economía”. Esto representa un compromiso firme de la Fed hacia la estabilidad de precios en medio de un entorno económico desafiante.

A medida que la economía navega por estas aguas inciertas, la Fed continuará evaluando cuidadosamente los datos y adaptando su política para mantener un equilibrio entre la estabilidad de precios y el empleo. Los próximos meses serán cruciales para determinar el camino que tomará la Reserva Federal en el manejo de las tasas de interés y su impacto en la economía estadounidense.