Un día como hoy, en 1597, el gobernante unificador del Japón, Toyotomi Hideyoshi, conocido como Taikosama, ordenó crucificar en la colina de Nishizaka, Nagasaki, al jesuita San Pablo Miki y a otros 25 religiosos y laicos, siendo la primera crucifixión colectiva en 15 siglos.