, 03 Jun. 23 (ACI Prensa).- El Arzobispado de Arequipa informó que más de 80 mil fieles participaron de la Misa que presidió el Nuncio Apostólico en Perú, Mons. Paolo Rocco Gualtieri; en la que se entronizó a la imagen de la Virgen de Chapi.
La Eucaristía celebrada el 31 de mayo contó con la imagen mariana que fue llevada desde su santuario en Polabaya, que ingresó en procesión a la Plaza de Armas de Arequipa, donde también está la Catedral.
Debido a la gran cantidad de fieles presentes, precisa el Arzobispado, no solo la plaza quedó abarrotada, sino también las calles aledañas.
De acuerdo a la solicitud del Papa Francisco, en la Misa se rezó por el próximo Sínodo de los Obispos, que se realizará en octubre en Roma, y que tendrá como tema: “Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión”.
En su homilía, el Nuncio Apostólico rogó así: “Virgen de Chapi, ruega por nosotros. Haznos cada vez más discípulos enamorados de Jesucristo y contagia nuestra alegría a los que encontremos, como tú lo has hecho”.
Por su parte, el Arzobispo de Arequipa, Mons. Javier Del Río Alba, agradeció al nuncio por su visita y dijo: “Estoy seguro que marcarán nuestro camino como Iglesia en Arequipa y también la vida de cada uno de nosotros”.
El prelado peruano también animó a rezar por el sínodo de los obispos, en comunión con el Papa y toda la Iglesia.
El arzobispo también agradeció la presencia de la imagen de la Virgen de Chapi.
“Por medio de ella le hemos pedido al Señor por los frutos del Sínodo, no solo a nivel global sino también por sus frutos en la Arquidiócesis, en nuestros hogares y en cada uno de los lugares donde nosotros nos desenvolvemos”, aseguró.
“Que cada vez podamos vivir más unidos y caminar más juntos bajo el manto de la Virgen, siguiendo las huellas de Jesús, nuestro Señor, en camino hacia el Padre, bajo impulsos del Espíritu Santo”, subrayó el prelado.
En la Misa participaron también Mons. Raúl Chau, Obispo Auxiliar de Arequipa, los vicarios generales y los sacerdotes de la arquidiócesis.
La Virgen de Chapi fue declarada Reina y Señora de Arequipa por el Papa San Juan Pablo II en 1985, cuando visitó por primera vez el Perú. Su fiesta se celebra el 1 de mayo.
